Diario de un ángel caído

EL INICIO

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Tengo una especie de sueño donde Adrian nos descubre a Rita y a mí en la cama; despierto agitado “uff solo ha sido un mal sueño debo calmarme”.

Al abrir los ojos alguien estaba agachándose hacia a mí con algo en la mano así que lo jalo y se da un golpe contra la pared, le pongo el ante brazo en el cuello sin dejar de sujetarle la mano con el objeto; con la rodilla le inmovilizo la otra mano, siento que alguien me jala con fuerza cuando mi vista y mi mente se aclaran veo a Pablo casi sin respiración poniéndose morado por la falta de aire reacciono y me levanto. Pablo se acomoda para poder respirar mejor mientras se toma del cuello cuando veo quienes me jalaba eran tres chicos del salón “pero yo sentía como si fuera un niño el que me estuviera jalando” Pablo ya empieza a recuperarse le extiendo la mano, él se levanta cuando veo lo que tenía en la mano era un marcador de seguro iban a hacerme una broma.

Al estar de pie me empuja lo veo algo molesto porque nadie lo había puesto así antes o al menos no en público; sabe que pronto todo el colegio se va a enterar que estuve a punto de matarlo sin mayor esfuerzo.

La verdad no estoy para sus estupideces tengo muchos problemas en la mente como para soportar sus caprichos así que le devuelvo el empujón; cae al suelo todos se hacen para atrás porque nunca habían visto que yo tratara así a Pablo tomo mis cosas doy media vuelta y empiezo a caminar.

En el camino uno de los guardias me impide salir; no me percato que todo el salón está viendo porque Pablo venia tras de mi enojado el guardia me empuja y eso me enfurece mas no se dé que forma lo golpeo, le rompo la nariz; casi le un brazo, le quito el arma y me la llevo; Pablo se detiene cuando vio lo que hice yo sigo caminando mientras todo el salón ya estaba corriendo la voz de lo sucedido.

Los profesores dan aviso a la puerta para que no me dejen salir; Pablo, Lucy (que estaba en el baño y vio todo con el guardia) y la directora van detrás de mí el otro guardia trata de impedirme salir así que le apunto con el arma y disparo a una ventana mientras se cubre abro la puerta y lo golpeo con el revólver antes de salir.

Mientras camino con el arma en la mano le saco las balas y la arrojo al interior del colegio cruzo la calle mientras camino sin dirección.

No se a donde voy, escucho que suena mi teléfono celular así que le quito la tarjeta SIM y la meto en el bolsillo me acerco a unos chicos que están jugando soccer, les pregunto si quieren comprar mi teléfono se que vale más de 400 dólares pero no me interesa cuanto me den así que les recibo los 100 dólares.

Llego a casa (si es que a esta pocilga se le puede decir casa), arrojo todo al suelo un pequeño radio que tenia se hace pedazos al estrellarse contra la pared nada me calma todo es tan confuso quiero llorar pero no puedo hacerlo de pronto siento que algo caliente me recorre por la mano izquierda y eso me calmo un poco al ver que era vi la sangre corriendo por la hoja del cuchillo que sostenía apretándolo con fuerza lo tome con la otra mano y lo pase por mis brazos una y otra y otra vez hasta que mi respiración era pausada y relajada me veo los brazos; están todos rojos llenos de sangre por alguna razón eso me calma así que decido darme una ducha.

Al ver mis brazos están muy cortados; no quiero que me dé una infección así que me aplico agua oxigenada para desinfectar las heridas.

Ya relajado pienso en lo que hice; sé que me expulsaran del colegio así que no tiene caso que vaya mañana a estudiar.

Con los 100 dólares podre comer toda la semana ya luego veré que hago para conseguir dinero. Decido arreglar esa pocilga para que parezca más decente; saco las cosas de las siete cajas que pude sacar de casa sin que se dieran cuenta, hay más cosas de mama y de papa que mías; entre ellas veo los títulos de papa y los premios que gano mama por los concursos que participo, también veo varias fotos donde estábamos juntos el dolor empieza a crecer de nuevo, será mejor que deje las cosas de ellos en las cajas; las acomodo al lado de mi cama.

Termino de ordenar y limpiar; vaya ahora ya no parece tan mal lugar quizás con unas flores y algo de color se vería mejor así que no comeré un día para comprar flores y ya veré donde consigo algo de pintura quizás le pida un poco al vecino que acaba de remodelar su departamento.


En BuScA dE mI mUnDo PeRfEcTo....!!!!!